Los que recordamos a tantos y tantos que con hondura y creatividad, en la dura tarea agrícola, nos dejaron su pasión por las uvas y los que fuimos testigos de su arduo, exigente y continuado trabajo, no podemos ocultar nuestra gratitud y homenaje sincero. Por todos vosotros y por esas fieles y entregadas mujeres que os acompañaron en la tarea de tan hondas raíces, alzo mi copa.